“Por tu cara bonita”, de Esther de la Puerta, nos invita a disfrutar de los retratos, como ventanas donde asomarnos a conocer a las personas que hay detrás de ellos, intentado averiguar la vida que hay más allá de la imagen.
Esther de la Puerta, en la que es su primera exposición pública, pone el acento en mostrar los sentimientos que le han despertado las personas que han llegado a ella para ser retratadas. A lo largo de las 20 imágenes que componen la exposición, la autora juega con la historia que guarda cada una de las personas retratadas, con las emociones que despiertan, con los gestos, las sensaciones, etc.
Las personas que visiten esta muestra podrán adentrarse en el mundo artístico de Esther de la Puerta, @turrydigital en Instagram, y ver cómo procura captar en sus ilustraciones digitales, los gestos, las historias que le cuentan, retándose para, a través de la observación, captar la esencia de cada protagonista.
En las creaciones de la autora, además de incorporar el dibujo digital, por las infinitas posibilidades que le ofrece, utiliza el retrato en acuarela, para que la mano siga su camino sin ceñirse a una imagen, a lo que añade la mezcla de otras técnicas, más enfocadas a la artesanía.
Esther de la Puerta se confiesa una artista autodidacta, ya que no posee formación artística específica, pero sí posee una gran curiosidad por crear. Sus referentes artísticos actuales son Débora Islas y Syahur. Cuando pinta un rostro, no se fija en nada en concreto, simplemente, busca algo que despierte su interés en ese momento: colores, sensaciones, etc. Le gusta fijarse en esos elementos que todas las personas tenemos y que nos hacen únicas. En muchas ocasiones usa como fuentes de inspiración imágenes de libre distribución.
En su casa, y desde niña, el arte ha estado presente a lo largo de distintas generaciones. Sus referentes más cercanos han sido su abuelo Miguel, quien ya pintaba, su madre, Marisa Turrillas, con sus oleos ha logrado inspirar muchas de sus creaciones y su tío Enrique de la Puerta, que posee grandes habilidades artísticas.
Sin duda, crecer oliendo y viendo el arte, va calando. La autora agradece a todas las personas de su familia su inspiración y como de una u otra forma han contribuido a esa capacidad de capturar la esencia de sus modelos.
Ha pintado desde siempre como hobby pero realmente no se había planteado que pudiera llegar a ser su medio de vida.
Esther ha tenido diversos trabajos que, como a muchas otras personas, la hicieron encontrarse con una gran oportunidad. Hace siete años tuvo la posibilidad de gestionar "La Tienda de Alfonso", establecimiento tradicional segoviano de enmarcación y manualidades, ya que el propietario inicial se jubilaba.
Tomó el mando de esta tienda durante casi 7 años, aprendiendo y disfrutando, pero también viviendo en primera persona el difícil trabajo de ser su propia jefa, vivir los agobios, los números, y el choque con una realidad que la obligó a cerrar. De esa etapa se queda con la cantidad de gente increíble que ha conocido y con la satisfacción de haber ido detrás de un sueño.
Actualmente comienza una nueva etapa vital, con una tienda online, dónde realiza encargos personalizados que pueden ayudar a las personas a plasmar recuerdos y momentos especiales.